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Edição Nº 39 - Fevereiro de 2012 - "Poetas Poesia II"






MARE NOSTRUM
Jorge Luis Gutiérrez



Mare nostrum em Português




Jorge Luis Gutiérrez: Es doctor y Magister en Lógica y Filosofía de la Ciencia por la Universidad Estadual de Campinas (UNICAMP). Actualmente es profesor de la Universidad Mackenzie y profesor de la Facultad de Filosofía de Sãn Bento, ambas en São Paulo, Brasil. Es profesor de filosofía antigua (griega). Ha investigado, en diálogo con la física, temas como el azar, la imprevisibilidad, la incertidumbre, la irreversibilidad y la libertad humana. Y en diálogo con la literatura, ha investigado las relaciones entre filosofía y poesía. Es autor de los libros: “Fragmentos de Ternura, Filosofía y Destierro”, “Aristóteles en Valladolid” e “Inundada de Luz, poemas de amor y filosofía episódica”. Es el editor de la revista electrónica "Pandora Brasil". Y fue uno de los organizadores del libro “Educar para la vida entera” (São Paulo, Editora Alínea, 2011). Es también editor de la Revista “Primus Vitam” del Centro de Ciencias y Humanidades (CCH) de la Universidad Mackenzie.



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    MARE NOSTRUM

    Jorge Luis Gutiérrez



    I

    Navegación lírica.
    Céfiro sostiene,
    con benigno soplo
    las velas erguidas.

    Rumbo insólito,
    alturas angulares,
    timones inerciales,
    arte.

    Ni loxodrómica,
    Ni ortodrómica.

    Brotan memorias que son
    como un melancólico epigrama.
    Recuerdo tu mirar invitativo
    reflejando la poética de lo imponderable.

    Un mascarón de proa con tu fisonomía,
    estetizase filosóficamente en el navío de los devaneos.


    II

    Corografía de la saga del horizonte,
    fantasía prodigiosa,
    serenidad escrita,
    seducciones literarias,
    materia narrativa restaurada,
    luminosidad nostálgica.

    Realidades re-imaginadas,
    sueños delirantes,
    míticos enigmas,
    pirotécnia de lo humano,
    alegóricos entre tonos.

    Orillas del encanto,
    amores exaltados,
    pleonástico silencio.


    III

    Yo:

    — “La primavera está terminando,
    tenemos sólo el verano para navegar...
    es imperioso llegar a nuestros puertos,
    de íntimas cabañas, de serenos cielos
    y literaturas festivas,
    antes que él invierno...”


    IV

    Tú:

    — “Pero yo puedo ser tu paraíso.
    Tú puede quedarte a navegar en mi piel,
    morder la manzana, sentir el olor de las granadas
    y guiarte por las constelaciones de mi desnudez...”


    V

    Yo:

    — “De aquí en adelante ninguna
    tierra será nuestra tierra,
    ninguna patria será nuestra patria.
    Seremos ininterrumpidamente extranjeros.
    Ninguna lengua será nuestra lengua,
    hablaremos continuamente con acento...
    Nuestros nombres serán pronunciados
    con consonantes que no conocemos...
    Y serán escritos con alfabetos
    que no podremos leer.
    Caminaremos por desiertos
    de los cuáles nunca habíamos escuchado.
    Atracaremos en bahías distantes e imposibles”.


    VI

    Tú:

    — “Iré contigo. Estaré a tu lado.
    Deja afirmarme de tu mano.
    Sólo quiero que prometas
    amarme para siempre”.


    VII

    Yo:

    — “Perdí mi patria... me fui siguiendo las nubes...
    los poetas me enseñaron a amar las nubes...”


    VIII

    Tú:

    — “El fuego de mi respiración
    se poetizará en tus ojos...
    Mis labios tendrán sabor a vino...”


    IX

    Yo:

    — “¡Ah! Como amaba los vientos
    efímeros, centellantes,
    que mecían tus cabellos..."


    X

    Tú:

    — "¡Ah! Si te hubieras quedado seducido

    en la margen de mi pasión resplandeciente”.


    XI

    Yo:

    — “¡Ah mujer!
    La más bella de toda tierra firme
    y todos los océanos...

    De las aldeas y riberas de los mares”.


    XII

    Tú:
    — “Recita otra vez el poema
    que hicisteis para mí
    en el comienzo de la primavera...”


    XIII

    Yo:

    “Mis besos quieren ser danza
    exhibiéndose en el escenario de su piel.
    Y si a veces sientes un corazón
    bailando junto a tuyo,
    una sensación como si
    tuvieras dos corazones,
    es mi corazón que se fue bailando
    mientras sueño.”


    XIV

    Tú:

    — “¡Ah! Si yo pudiera transformar
    tus novelas en navegaciones
    por el mare nostrum de mi cuerpo.”


    XV

    — “El mar océano te espera” —
    Dijo la furia de los vientos.

    — “Siente el azul perfume femenino de mi alma” —
    Tú dijiste bailando en la luz de la tarde.


    XVI

    Yo:

    — "Si no tuve la eternidad para amarte,
    tendré lo fugaz para recordarte".


    XVII

    — “¡Ah! Si me hubieras amado para siempre...”
    Tu voz murmuro como una suave brisa
    en los arrecifes de lo que nunca tuvimos.
    En las ensenadas melodiosas de lo que podría haber sido.


    XVIII

    Yo:

    — “Una lágrima tuya será mi brújula”.


    XIX

    — “¡Ah, si me hubieras jurado amor eterno...
    Como serían bellos tus recuerdos!” —
    Tú cantabas por las calles de una ciudad asoleada.


    XX

    (Fin. Coro nocturno de sirenas en un roquerío.
    En el cielo la constelación de las pléyades)

    “¡Ah! El amor.
    ¡Ah! El vino.
    ¡Ah! La poesía.
    ¡Ah! El extenso mare mostrum del deseo”.


    Mare nostrum em Português



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