JAIME TORRES BODET
Consolación
otoñal
Cuando llegue el otoño que inicia
la ficción de este abril entusiasta,
en la tarde ya límpida y casta
que deshoje una sabia caricia,
a la postre cansados de habernos
vanamente agrandado las cosas,
cortaremos las últimas rosas
que presagien amables inviernos;
y diremos quizás: éste ha sido
el amor, ésta fué la tristeza;
un perfume, una estrella, un sonido...
Ya la Vida cumplió su promesa.
De la fe que en la sombra forjamos
y del breve anhelar que vivimos,
y de toda la dicha que ansiamos
y de toda la hiel que bebimos,
¿qué divina quietud se reintegra
al dolor de este otoño que gime,
y qué grave perdón nos redime
o qué mansa virtud nos alegra?
Sólo amor en su anhelo persiste;
mas no es hoy como enantes el beso
seductor y fugaz y por eso
nos ofrece un sabor menos triste...
Y pues todo fué así, y éste ha sido
el amor y ésta fué la tristeza,
¿para qué deplorar lo vivido?
Un perfume, una estrella, un sonido...
Ya la Vida cumplió su promesa.
(Jaime Torres Bodet - mexicano).